top of page

Estragos de mi último estrellón amoroso

Después de mi último estrellón amoroso quedé seriamente inseguro sobre mi intuición y percepción de las relaciones sociales en general. Casi que no importa que tan “evidente” (y lo pongo entre comillas porque para mi ya nada es evidente) las personas hagan cosas para demostrar interés, cariño o atracción, automáticamente cierro cualquier posibilidad y entro en un modo de “shutddown” en el que simplemente no se como continuar con la interacción. Es como si nunca terminase de creerme que realmente puede haber una conexión… ¿ayuda? Jajaja

IMG-9769.jpg
IMG-9759.jpg
IMG-9774.jpg
IMG-9771.jpg
IMG-9774.jpg

Querida persona que me escribe,

En lo personal, soy una persona que vive fascinada por la conexión, como eso que sentimos cuando hablamos por horas con una persona de la vida y de sus misterios; como eso que sentimos cuando confiamos, sin dudar dos veces, en la persona que está al lado; como eso que sentimos cuando miramos a los ojos a alguien; cuando callamos en compañía; cuando hay cincuenta temas de los que se hablan… cuando hay uno que no para. 

 

El tipo de conexión que sentimos al ver una obra de arte, al ver un paisaje, al ver a dos personas nunca antes vistas y con las que no hubo, no hay, ni habrá contacto alguno. Así que, lamento informarte, pero creo que en tu pregunta, está la misma respuesta. Y en ese sentido, hay aspectos en los que te recomiendo trabajar. 

 

Pero antes de que lleguemos a eso, quiero decirte algo: querida persona que me escribe, creo que estoy teniendo una conexión contigo. Ni siquiera creo. Es algo de lo que estoy segura. Tan segura como que la gravedad existe. Tan segura como que dos más dos da cuatro. 

 

Un tipo de conexión en el que confías lo suficientemente en mí, sin nunca antes haberme visto, sin nunca antes, realmente, haberme conocido.  Una conexión donde me escribes sobre una de tus grandes inseguridades y permanezco fascinada por el hecho de que llevo tres días pensando en: ¿Qué le voy a decir a esta persona?. Una conexión donde cada palabra que he leído en los últimos días las relaciono con una posible respuesta a tu situación e incluso, donde he analizado cada interacción y cada sentimiento que he tenido en estos últimos 20 años. 

 

La verdad es que siempre supe que iba a decirte. Las preguntas que no hiciste están tan claras detrás de la pregunta que si hiciste. No estás cerrado a una conexión. Estás cerrado a lo que puede pasar cuando la tienes; te has convencido que obstaculizar ese sentimiento te va a proteger de lo que pasó la última vez que lo permitiste. Pero no lo hará. 

 

Como dijiste, el estrellón amoroso fue en el pasado, pero sospechó que una parte de tí sigue congelado ahí. Sospechó, casi con certeza, que ese tipo de conexión que te llevó a una de las peores situaciones en el amor, es lo único que te está impidiendo de volver a creer que hay una. 

 

El punto es que tú puedes decidir.  Tú puedes decidir los términos de tu vida. Tú puedes determinar las fuentes de tus inseguridades y de aquello que está mortificando tu intuición. Tú eres el que tiene la facultad de describir el tipo de conexión que quieres tener.  ¿Acaso no te has dado cuenta que tu miedo a estrellarte otra vez, ha creado un campo de fuerza propio? La retención altera la realidad. Hace que la gente sea incapaz de saber lo que realmente sienten. 

 

Liberate de eso. Sé valiente, sé auténtico, práctica permitirte una conexión todos los días, con música, con libros, con arte. Práctica para que cuando llegue una persona que valga la pena, sea automático. La conexión ya no se definirá por lo que pasó la última vez que la tuviste.

¡Contáctanos!
Recomendaciones e inquietudes. 

¡Gracias!

Aquí se respiran letras

THE FIVE STAR BOOKS

2020. 

bottom of page